TIEMPO: para VIVIR HOY
(En Memoria del hijo que se adelantó en el tiempo)
1- El fin de un período y el inicio de otro es para vivirlo como presente. Aunque puede ser momento para reflexionar y aprender del pasado y definir propósitos futuros en la privacidad del silencio y la serenidad familiar, con los más próximos, la vida solo existe si nos damos oportunidad de vivirla cada día, sin perturbarnos por diversas ruidos internos y externos, la multitud, el comercio y los excesos. Sé feliz hoy: “El tiempo de Dios es perfecto” (Eclesiastés). 2- Ahora, convivamos en paz, entre la naturaleza y con la comunidad, con nosotros mismos, con frecuencia, el principal reto a vencer. Comencemos en nosotros. Seamos vida para otros, que nadie nos lo impida, démonos oportunidad para convivir en serenidad y paz. Contribuyamos, desde una actitud esperanzadora y positiva, en la prosperidad común. “Toda experiencia se origina en tu interior” (Chopra). 3- Medir el tiempo es convención humana relativa. En distinta época, cultura y región el calendario difiere. Su fragmentación pierde la integralidad y continuidad de la existencia, impone una “realidad” virtual, lineal y única que limita y es irreal. 4- En este período de traslación de nuestra Casa Común alrededor del Sol (velocidad sorprendente que no nos percatamos de unos 107 mil kilómetros por hora), que Occidente llama 2020, según el calendario gregoriano (impuesto por el Papa Gregorio XIII, en 1582), que tomó como año cero el nacimiento (año supuesto) de Jesús, para los musulmanes, en fecha distinta, iniciarán 1442, los hindúes 1942, los chinos 4717 y los judíos 5780. Será 1399 para los persas o iraníes a partir del 21 de marzo. Hay otros… No es un número ni una referencia relativa lo que importa… 5- No añoremos ni esperemos un año, sólo vivamos el amanecer de cada día. “Señor, hazme un instrumento de tu paz” (san Francisco de Asís). El tiempo es nuestra riqueza, seamos dueños de él para construir y ser felices. “Todo tiene su tiempo…” (Eclesiastés). 6- Agradezco el tiempo que me toca vivir y que recibí como regalo al nacer…; ¡el momento en el que soy consciente de la vida que tengo en mis manos! Gracias a quienes lo hacen posible… “El deseo de luz produce luz. Hay verdadero deseo cuando hay esfuerzo de atención” (Simone Weil). Tu presente es tuyo, vívelo, viva cada quien el suyo y coincidamos en el camino cotidiano que recorremos juntos un tiempo. El propósito de Dios: ¡sé feliz! Paz y bien. 31 de diciembre de 2019, en la víspera de un nuevo amanecer. |