https://mundo.sputniknews.com/radio_gps_internacional/201808251081478570-managua-conflicto-desarrollo/ (viernes 24 de agosto de 2018; Radio M24 de Montevideo Uruguay, audio de entrevista, con Gabriela Casullo: minuto 7 – 18)
Estamos en comunicación con el académico y experto en seguridad nicaragüense Francisco Javier Bautista. Bautista gracias por recibir a GPS Internacional, desde Montevideo, Uruguay.
Responde: Muchas gracias Gabriela por su llamada.
¿Cómo es la situación en las calles en estos últimos días, respecto a las semanas anteriores?
Responde: Quiero decirte que por lo menos en las últimas cuatro, cinco semanas, he observado una recuperación acelerada de la normalidad en el funcionamiento del tránsito vehicular, de los negocios, de la actividad social y económica en general de la población, me parece que eso es alentador, porque hubo tal vez, un mes, o dos meses donde prácticamente el tráfico era insignificante en las calles, donde la mayoría de los negocios estaban cerrados por temor, o con horarios extremadamente restringidos, y en general la actividad social, cultural, estaba totalmente estancada.
En el último mes, afortunadamente pienso, siento, percibo cuando ando en las calles, y cuando camino en las calles, que cotidianamente lo hago, esas actividades han recuperado, o están recuperando su ritmo normal. Este punto es importante. También diría que los tres grandes daños provocados en esta crisis de abril, julio, son: en primer lugar, indudablemente, el daño humano y moral que provoca, hay un daño moral, humano, irreversible, pero hay un daño moral que después haber tenido una situación económica, social bastante próspera, el país había mejorado mucho, el empleo, la salud pública, la educación, etc., de repente sentís que todo se desploma y eso tuvo el efecto en la sociedad de preocupación, de desconfianza, etc. Me parece que eso poco a poco comienza a reactivarse.
El otro daño importante, es el daño material y económico, el daño ya está causado, lo perdido está perdido, algunos estiman, por ejemplo, hablan de cien mil empleos menos, posiblemente, es muy importante para el país, quizá represente el ocho o nueve por ciento del empleo formal. Y el tercer daño, por eso me alegra tu llamada, es el prestigio internacional, la imagen internacional que se generó de Nicaragua, a partir de lo ocurrido. Esta imagen, desde mi opinión, tiene un fuerte énfasis de manipulación y de parcialidad, creo que no se ha visto el escenario completo, no se han visto las dos caras de la moneda, los medios internacionales, a partir de algunos actores locales, han trasladado una imagen sesgada, imparcial, sin llegar a la comprobación de las evidencias, ni identificar las circunstancias, por ejemplo, con mucha ligerez se dice: “Hay un muerto, lo mató fulano, punto.” Y se condena a fulano por la muerte causada, sin entrar a identificar evidencias, descalificando a las autoridades competentes para buscarlas. Creo que esos son los tres grandes daños que Nicaragua ha sufrido, tengo confianza, hay que tener confianza de que el pais logrará levantarse con fortaleza, dedicación y trabajo, como lo ha hecho en la historia pasada.
Usted me habla de una mejoría afortunadamente, en las últimas horas se ha hablado de un aumento de la migración de nicaragüenses, sobre todo hacia Costa Rica, ¿se está dando esto?
Responde: El tema de la migración a Costa Rica no fue en las últimas horas, realmente el fenómeno comenzó a darse desde que el conflicto estalló en abril; la gente busca una situación de paz, una situación de tranquilidad, entonces comenzó a darse un flujo migratorio; eso ocurre cuando hay un desastre natural, cuando hay un conflicto militar, cuando hay un problema de inseguridad, como, por ejemplo, el caso del Salvador, Guatemala, la gente sale por las pandillas que asolan el país.
Entonces aquí, a partir de abril se comenzó a dar un flujo sistemático, que llega a su nivel más alto, porque hay un problema de acumulación, en su momento, indudablemente, y comienza a ser una preocupación importante en Costa Rica particularmente, que es el principal destino de los nicaragüenses, porque cuando en julio el país retoma el control del territorio nacional, las autoridades policiales, etc., y se desmontan los distintos grupos que estaban provocando tranques, con niveles de violencia altos, utilizando explosivos, armas hechizas, pistolas, etc. Y que prácticamente tenían secuestrada ciertas partes del territorio nacional. Entonces, cuando se desmontan, una parte de esas personas digamos, sufrió captura policial, otros se fueron a su casa, y un grupo importante, desafortunadamente abandona el pais. Entonces, el conflicto que se está dando en Costa Rica, y la preocupación de los costarricenses, que también es peligrosa, porque puede generar xenofobia, es que tenés una gran población de nicaragüenses sensatos, trabajadores humildes y sencillos, realmente bien intencionados que están llegando a Costa Rica, pero también se fue un grupo, no quiero decir cantidades, pero si un grupo de personas que estuvieron vinculados directamente en la violencia provocada, y ese grupo de personas, desde mi opinión, han dado algunos problemas de comportamiento, de violencia en Costa Rica, situaciones extremas, irracionales, como quemar la bandera de Costa Rica en el propio territorio costarricense, me parece una irresponsabilidad, lo cual demuestra el nivel de violencia que ellos estaban generando aquí, en los distintos puntos de conflicto que teníamos en Nicaragua, que afortunadamente fueron desmontados. Entonces, muchos de ellos tienen causas pendientes con las autoridades nicaragüenses, desde antes del suceso, y algunos también cuando el suceso, como provocadores de muertes, de daños materiales, de violencia en general.
Bautista, ¿cómo se ha logrado revertir esta situación?
Responde: Creo que el principal factor que debe ser la movilización social. Tengo confianza plena, que el pueblo nicaragüense organizado, movilizándose política y cívicamente, es capaz de desmontar la violencia, ese es el camino. El camino es movilización social y cívica, y, en segundo lugar, el diálogo político, me parece que eso es fundamental. Aquí, sin embargo, en el diálogo político tenemos una pequeña dificultad, es que hay que entrar en el proceso de identificación de actores legítimos, representativos, que sean capaces de discutir, de negociar, de conversar en la construcción de soluciones políticas al problema que el país enfrenta. Una crisis en el país que comenzó por una demanda específica, justa, como fue la reforma a la Seguridad Social, y que poco a poco fue cambiando, en un corto plazo, como un planteamiento de un grupo extremista, de “que el gobierno se fuera ya”, es decir una acción de hecho, que, por los niveles de violencia, tenía los rasgos de un golpe de estado, que afortunadamente no prosperó. Creo que los nicaragüenses tienen derecho a tener posiciones políticas distintas, incluso no estar de acuerdo con el gobierno, o si estar de acuerdo, pero lo que no tenemos derecho es a imponer ese criterio por la violencia y limitando cualquier norma jurídica. Eso es peligroso para el país, y para América Latina.
¿Y existe algún canal de diálogo abierto entre el gobierno y la oposición?
Responde: Lo que pasa es que ahorita el problema de la oposición, es un problema de definiciones de liderazgo legítimo y orgánico; yo diría que en Nicaragua tenemos tres tipos de oposición ahorita, una oposición legitima institucional que participa en el parlamento, una oposición cívica digamos, vinculada fundamentalmente a los organismos no gubernamentales, y otra oposición violenta y extremista que está vinculada y es amorfa. Entonces, ese escenario presenta una complejidad, la identificación de actores representativos con las contrapartes efectivas, con los cuales se pueda negociar, es una pequeña dificultad. Entonces, por eso creo que existe esa dificultad, sin embargo, espero que pueda ser superada en brevedad. Creo que la comunidad internacional puede ayudar un poco a buscar el balance apropiado de las circunstancias, me parece que la comunidad internacional, y particularmente la secretaria de la OEA y otros actores, podrían estar siendo contraproducente al manejar posiciones parciales, y pueden ayudar a buscar los consensos y equilibrios. Al basar decisiones, percepciones, posiciones políticas o institucionales a partir esa información parcializada, es erróneo, incluso puede ser grave para el presente y futuro del pais. Una posición debe construirse a partir del conocimiento de las partes, de las posiciones correctas o incorrectas, y buscar los puntos de encuentro, que desde mi opinión existen, son perfectamente identificables, y son el camino efectivo para la construcción y el fortalecimiento democrático.
¿Usted cree que los nicaragüenses no se han sentido respaldados, apoyados por la comunidad internacional?
Responde: Lo que pasa es que, en algunos sectores de la comunidad internacional, hemos percibido muchos, una posición ligera, superficial y parcial; no es ese el asunto, no es que alguien te respalde, el problema es que alguien te ayude a buscar posiciones de consenso y soluciones políticas sensatas. En ese punto me parece ha fallado el esfuerzo. Hay, a veces, mucho sesgo vinculado con la política internacional, con intereses geopolíticos, o de actores políticos internacionales que quieren mover las decisiones nacionales hacia puntos extranjeros, o intereses extranjeros, perdiendo de vista el interés legitimo del pais, de encontrar la solución de sus problemas. Es decir, creo que más que una actitud injerencista externa, lo que el pais necesita es apoyo y colaboración para construir consensos nacionales.
¿Y de aquí en más ahora que es de esperar?
Responde: Creo que hay dos caminos muy claros, que los dije al principio. La movilización política efectiva, la organización social efectiva, de naturaleza cívica, donde los actores nacionales, los de las fuerzas nacionales, sean capaces de enfrentar sus posiciones de manera libre. Y la construcción de un diálogo político, inclusivo, amplio, con actores legítimos, donde puedan construir sus soluciones, de cara a un proceso político institucional que respete el marco constitucional. Creo que ese es el camino, y me parece que nos hemos dado cuenta, los actores, los que han promovido el conflicto, y muchos otros, que las posiciones extremas destruyen, limitan el futuro del pais, y que esas posiciones extremas traen caos y anarquía, y eso no nos beneficia.
Francisco Javier Bautista, académico y experto en seguridad nicaragüense, le agradezco muchísimo estos minutos aquí en GPS Internacional.
Responde: Muchas gracias, saludos.