Derrotero de lucha antiimperialista y soberanía de Nuestra América. PATRIOTISMO HEROICO DE SANDINO. (Texto reducido).
Augusto C. Sandino nació para Nicaragua, para Latinoamérica y el mundo en su trascendente identidad de dignidad, conciencia y acción patriótica, social, nacionalista y antiimperialista, a principios de mayo de 1927, a los 32 años, más allá del natalicio del 18 de mayo de 1895 en Niquinohomo, cuando Margarita Calderón lo dio a luz. En mayo inició su existencia, tres décadas después, nació para la inmortalidad. Comenzó a ser Sandino, desde sus circunstancias: “Mi mayor honra es surgir del seno de los oprimidos”.
Fue testigo, el 4 de octubre de 1912, del convoy seguido de una carreta que pasaba por su pueblo con el cuerpo acribillado de Benjamín Zeledón, llevado para exhibirlo “como trofeo de guerra” por los agresores; cuentan: “El Gral. Zeledón, con una sonrisa en los labios, parecía que se burlaba de la muerte”. Entre la muchedumbre estaba Augusto Calderón, de 17 años, quien se mostró al mundo quince años después y reconoció a Zeledón, “Apóstol de la Libertad”, como precursor antiimperialista.
El 4 de mayo de 1927, Stimson, representante del presidente de EE.UU., impuso el Pacto del Espino Negro, en Tipitapa, bajo un árbol de espino negro, José María Moncada, líder militar liberal se rindió frente al poderío militar y las prebendas del invasor. El 6 de mayo The New York Timepublicó: “Rebeldes de Nicaragua se rinden bajo amenaza de guerra por parte de US”. Stimson, enviado por el presidente Coolidge, produjo dos instrumentos imperiales: amenaza militar y halago, recompensa o pago para atemorizar, comprar, someter e imponerse. La noticia, después de la reunión entre Moncada, y Stimson, indicaba: “no ha llegado a un acuerdo de paz definitivo, el general José María Moncada, comandante de los ejércitos liberales, anunció esta noche que ante la insistencia de EE.UU. estaba listo para deponer las armas…”. Agrega: “Sr. Stimson me habló”, de que “el gobierno de Estados Unidos intenta restaurar la paz en Nicaragua inmediatamente y usará la fuerza si es necesario”. Dos días después: “Confirmada amenaza contra Nicaragua”. “La evidencia muestra que Stimson obligó a los liberales a ceder o enfrentar los rifles de los marines”, reafirma: aplicaron “la idea del brazo fuerte”, ello refleja la adopción de la política que se ha de aplicar “en pequeños países latinos perturbados”, “No parece haber duda de la información obtenida de que el Gobierno de EE.UU. ha intervenido en Nicaragua…”. William Borah, jefe del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, expresó satisfacción por el acuerdo.
Según Time: “El presidente Coolidge les parecía a los nicaragüenses que había asumido el papel de dictador en los asuntos de Nicaragua”; “Las actividades del presidente, actuaron a través de su representante provocaron un comentario del senador estadounidense LaFollette: “La admisión por parte del Dpto. de Estado de que Stimson, hablando en nombre del presidente, amenazó con una guerra abierta contra los liberales de Nicaragua es una revelación sorprendente de que el presidente, al llevar adelante su política de imperialismo despiadado en América Central, está dispuesto a violar la constitución, que otorga el poder de hacer la guerra únicamente al Congreso”.
El TNYT: “La tregua en Nicaragua la gana Stimson”, difundió: El programa para el establecimiento de la paz y su continuidad fue incluido en el comunicado del Departamento de Estado”, completó: completar desarme, organizar la constabularia comandada por oficiales americanos, supervisión americana de elecciones de 1928 y a continuación en el país de suficiente fuerza americana de marines como garantía de orden. “ De esto se ve que la política de supervisión que los EE.UU. ha estado operando en los países del Caribe insular, en la República Dominicana y Haití, se extiende a Centroamérica”. “Esto es de extrema importancia en tanto que no implica una nueva política en las pequeñas naciones latinoamericanas que han sufrido los efectos de frecuentes revoluciones políticas armadas. Indica una intención por parte de la Administración Coolidge de aplicarlo de manera más general con miras a prevenir disturbios que podrían significar problemas para los Estados Unidos en sus relaciones internacionales ”. TNYT divulgó: “El coronel Stimson dijo que planeaba salir para Nueva York el lunes después de recibir ayer el mensaje del general Moncada, líder militar liberal, y de once de los generales que aceptaron los términos del desarme y la reconstrucción. Solo un general liberal, Sandino, rechazó los términos, y ha partido con una pequeña banda de hombres. Los problemas que pueden plantear grupos como el encabezado por Sandino ocuparán la atención de la policía local, que se formará según los términos del acuerdo, y de los infantes de marina americanos, que erradicarán por la fuerza, si es necesario, el bandolerismo en el país”.Según Time: “Un abogado de Manhattan había desarmado a la República de Nicaragua, … con el presidente detrás de él y sin el Congreso en sesión, había ejercido el poder de vida o muerte. Por persuasión y amenazas de fuerza había obligado a los ejércitos Conservador y Liberal a deponer las armas y someterse al control estadounidense hasta 1928, cuando EE.UU. garantiza supervisar una elección imparcial”.
Moncada cedió por la amenaza y prebendas, no tenía interés en confrontarlo, no solo por la capacidad bélica, sino porque guardaba afinidad con sus intereses. Cedió ante “las garras de la monstruosa águila de pico encorvado”, -dijo Sandino-, continuó la ocupación, opuesto al patriotismo, ignoró la independencia, al doblegarse ante el invasor: es traidor a la patria. Fue vergonzoso. Sandino proclamó: “Nadie lo autorizó a que abandonara las filas de la revolución para celebrar tratados secretos con el enemigo, mayormente con los invasores de mi Patria”.
El 12 de mayo Moncada se reunió en Boaco con los generales para persuadirlos de aceptar el desarme, convenció a once y lo comunicó a los americanos: “ Solo un general liberal, Sandino, rechazó los términos, y ha partido con una pequeña banda de hombres ”. La noticia fue divulgada internacionalmente por el Dpto. de Estado y The New York Time, era el inicio de la “gesta imposible” que asumía con un creciente protagonismo patriótico de dignidad que, al principio, fue subestimado. Aunque afirmó que “no era ni militar ni político”, mostró durante los seis años, liderazgo, destreza militar y habilidad para comunicar un mensaje movilizador. Díaz Lacayo refiere: “El 4 de mayo, Día de la Dignidad Nacional, es la efeméride más importante del Sandinismo, y probablemente de la historia moderna de Nicaragua. Sin 4 de mayo, nunca hubiéramos tenido Revolución el 19 de julio de 1979”. Ese día la guerra civil se convirtió en guerra de liberación nacional, por soberanía y antiimperialista. La victoria de 1979 fue posible por la rebelión heroica iniciada por Sandino en mayo de 1927, cincuenta y dos años antes.
Cualquier análisis dirá que fue temerario, decisión suicida carente de éxito. Evidencia de heroísmo con convicción y compromiso. No consideraban posible que un individuo y sus rebeldes se opusieran a EE.UU. y enfrentaran al poderoso ejército. Hasta mayo 1927 habían desplegado la mayor fuerza militar americana en América Latina: plazas, rutas, ferrocarril y puertos estaban bajo control de los invasores.
Stimson salió de Nicaragua el 18 de mayo presumiendo de la misión cumplida. Era el cumpleaños 32 del líder rebelde que no se rindió y al que se sumó un grupo de patriotas y de héroes contagiados por la locura y voluntad patriótica nacionalista y digna. Llegó a Washington para presentar ante Coolidge su informe. En el país quedará la resistencia de los que “no se venden ni se rinden”, por la soberanía, la autodeterminación e independencia que Sandino, “hombre heroico, héroe legítimo, como tal vez no me toque ver otro” -dijo Mistral-, Padre de la Revolución Popular y Antiimperialista, instauró como principio fundacional. Desde la sensibilidad social de origen asumió un camino sin retorno, una posición revolucionaria, de acción y elaboración político-ideológica, un compromiso indeclinable frente a la realidad vergonzosa, rechazó el acuerdo o pacto impuesto por los americanos y aceptado por Moncada. Asumió frente a la sumisión una posición de dignidad antiimperialista.
Para condenar la traición, -grave delito y pecado capital-, para asumir la dignidad, patriotismo y antiimperialismo del santo mitológico, Leonel Rugama , escribió: “Como los santos”: Ahora quiero hablar con ustedes /o mejor dicho /ahora estoy hablando con ustedes…/… Ahora quiero hablarles de los santos: SANDINO …/…
Salvador Calderón , opuesto a la intervención, en: “Últimos días de Sandino” repudió el asesinato cometido con complacencia americana: “su figura llegó a ser el símbolo de un gran ideal y sus hechos heroicos adquirieron resonancias épicas y marciales”. Al contar sobre la siniestra noche (21.02.1934), escribió: “Sí, Sandino vive ya en la Gloria y vivirá eternamente en el corazón de los que lo amaron y en el remordimiento perenne y tenaz de sus victimarios”. Gabriela Mistral , lo llamó “General de hombres libres, hombre heroico, héroe legítimo, como tal vez no me toque ver otro”, resaltó al “pequeño ejército loco de voluntad de sacrificio”. Afirmó que Sandino era héroe, contra el calificativo de “bandido” que daba Hoover, presidente de EE.UU. Pablo Neruda, lo llamó: “Aquel amigo” en Canción de Gesta ; lo nombró: “el capitán del pueblo: Augusto C. Sandino”: “Después Sandino atravesó la selva y despeñó su pólvora sagrada contra marinerías bandoleras …/…Y en este canto quedará su nombre / estupendo como una llamarada /para que nos dé luz y nos dé fuego /en la siguiente de sus batallas. …
Eduardo Galeano, en “Ventana sobre Sandino”: “Sandino ¿ha vencido?”: “Somoza sale de la casa del embajador. Sandino llega a la casa presidencial. Mientras Somoza se sienta a trabajar con sus oficiales. Sandino se sienta a cenar con el presidente. Somoza cuenta a sus oficiales que el embajador de los Estados Unidos, Arthur Bliss Lane, acaba de darle su apoyo incondicional para matar a Sandino”. Carlos Fonseca Amador, en el Ideario Político de Augusto César Sandino recoge el pensamiento del héroe y vincula la continuidad histórica de ideales y propósitos, asumiéndolo como instrumento para análisis y acción. Enuncia: “la restauración de nuestra independencia nacional”, “defender la lealtad y el decoro nacional”, “defender la soberanía de la Patria”, “toda intromisión extranjera en nuestros asuntos, sólo trae la pérdida de la paz y la ira del pueblo”. El ideario sandinista transmite autodeterminación e independencia, es centroamericana, latinoamericana e indo-hispana.
Froylán Turcios, escribió “más de cuatro mil cartas a los hombres prominentes de todo el mundo y a las instituciones de carácter cívico de que tuve noticias, haciendo conocer el proceso del movimiento libertario”; “los patriotas peleaban, en las montañas nicaragüenses, contra los invasores anglo-sajones”. Sandino dijo: “Ustedes están en la obligación de hacer comprender al pueblo de América Latina, que entre nosotros no deben existir fronteras y que todos estamos en el deber preciso de preocuparnos por la suerte de cada uno de los pueblos de la América Hispana, porque todos estamos corriendo la misma suerte ante la política colonizadora y absorbente de los imperialistas yanquis”. Miguel Ángel Asturias: “qué mástil más inhiesto y más alto, el nombre de Sandino, vivo, excelso y reivindicador; ¡Tomad la bandera de Sandino! ¡Haced de cada libro, de cada periódico, de cada papel escrito, de cada radio, de cada canal de televisión, de cada pantalla cinematográfica, una voz que clame contra el silencio que se nos quiere imponer! ¡Hablad en las plazas, en las universidades, en todas partes, de ese General de América, que se llamó Augusto César Sandino!”.
No es patriótica la traición contra quien defiende la soberanía y la autodeterminación; ni contra el bien común, ni ofrecerse al poder externo para saquear las riquezas nacionales, ni venderse, rendirse, entregarse. No es cristiano el oportunismo, la complicidad para cortar el futuro para provecho hegemónico externo e injerencista que no acepta la capacidad de los pueblos de determinar su destino. Obstruye la esperanza de los más necesitados, que son propósito revolucionario de prosperidad y equidad. Diez puntos sobre el legado de Sandino: 1). Soberanía y autodeterminación de los pueblos, 2). Identidad latinoamericana e indoamericana, 3). Dignidad, 4). Fidelidad a la patria e independencia, 5). Solidaridad entre los pueblos, 6). Firmeza, convicción y persistencia, 7). Consecuencia entre pensamiento y práctica, 8). Es inaceptable la traición, 9). Fe en el pueblo, 10). Confianza en el futuro.
Su proclama de profundo valor, fue denuncia internacional y conciencia latinoamericana para sacudir la dependencia y restaurar la dignidad, expresa la visión y la naturaleza libertaria de la lucha que sigue vigente. Con la fuerza de un hombre moviendo montañas: “Soy nicaragüense y me siento orgulloso de que en mis venas circule, más que cualquiera, la sangre india americana que por atavismo encierra el misterio de ser patriota leal y sincero”. “Los pesimistas dirán que soy muy pequeño para la obra que tengo emprendida; pero mi insignificancia está sobrepujada por la altivez de mi corazón de patria, y así juro ante la Patria y ante la historia que mi espada defenderá, el decoro nacional y que será redención para los oprimidos” (San Albino, 01.07.1927); el mensaje en respuesta al jefe americano: “Yo quiero patria libre o morir. No les tengo miedo; cuento con el ardor del patriotismo de los que me acompañan”, confirma la Guerra Antiimperialista, germen de la Revolución Popular Sandinista para cambiar la historia, derrotero de pensamiento, conciencia y acción de Nuestra América.
Darío, en Cantos de Vida y Esperanza, los cisnes y otros poemas, formula cuatro contundentes preguntas: “ ¿Seremos entregados a los bárbaros fieros? / ¿Tantos millones de hombres hablaremos inglés? / ¿Ya no hay nobles hidalgos ni bravos caballeros? / ¿Callaremos ahora para llorar después?”
¡Sandino vive! ¡Viva Sandino!
Nota: foto de portada: AC Sandino, El Comercio 25.05.27 (Colecciones digitales del IHNCA-UCA).